Pedagogía mayangna: entrevista con Larry Salomón

mayo 20, 2021

8 min

En esta entrevista hablamos con Larry Salomón, un joven abogado y educador comprometido con los derechos de los pueblos indígenas de Nicaragua, originario  de  la comunidad mayangna de Awas Tingni, en la Costa Caribe. Actualmente trabaja como consultor independiente en temas de Derecho Ambiental y también es profesor universitario en Bluefields Indian & Caribbean University (BICU).

Es el creador de uno de los primeros cursos virtuales para aprender la lengua indígena mayangna, dirigido a estudiantes de todo el mundo. Para impartir el curso Larry tuvo que crear sus propias herramientas pedagógicas y didácticas para enseñar una lengua que se encuentra en peligro de desaparecer. 

¿Cómo comenzó la idea del curso?

Yo soy profesional, anterior a cursar la carrera de Derecho, yo saqué una carrera que se llama Educación Intercultural Bilingüe, y resulta pues que en esa profesión logré comprender las diferentes dimensiones de importancia de la identidad, de la lengua, del Derecho, de la cosmogonía, del pensamiento propio, de la filosofía.

Vi la ignorancia; la ignorancia absoluta de la gente, en cuanto al conocimiento de la diversidad lingüística, de la diversidad de pueblos que existen o que tiene Nicaragua. En nuestra Constitución Política  se habla de una identidad, de una nación multicultural. Pero la ciudadanía lo desconoce. Eso ha sido uno de los motivos grandes, dar visibilidad a la interculturalidad.

¿Cómo fue crecer para vos en ese mundo multilingüe?

La misma necesidad comunicativa te hace aprender otras lenguas. Estamos en una sociedad diversificada, requerimos reforzarnos y conocer otros pueblos. Entonces en mi caso por ejemplo, mi primera lengua es mayangna. Mi segunda no es el español, es el miskito, otra lengua indígena. Mi tercera lengua es el español y entonces van sumándose otras ¿no? Aquí lo importante es la necesidad de la comunicación; pero sobre todo en el marco del respeto, en el marco de la pluriculturalidad, la interculturalidad y la multiculturalidad. Entonces igual quisiera que el respeto sea viceversa, no solamente de la minoría hacia la mayoría; pero también desde la mayoría hacia la minoría. El que es hablante de la mayoría no se siente forzado, no siente la necesidad, tampoco cree que tiene importancia. Pero la gente que entiende de la importancia milenaria, filosófica, estructural de las lenguas indígenas, decimos: ‘okey, tenemos que aprender’, podemos aprender y convivir en este mundo diversificado.

¿Cómo se transmite el conocimiento de generación en generación?

Fundamentalmente las lenguas indígenas para su conservación hasta ahora ha sido la oralidad. Hasta unos pocos años atrás, ha sido la oralidad. Ahora pues estamos optando por otros métodos como la escritura. A escribir nuestros conocimientos. A escribir nuestro sistema de pensamientos. A escribir nuestras formas de vida, pero lo tradicional que se ha puesto en práctica ha sido la oralidad, la transmisión de generación en generación. Ha corrido el riesgo que muchos pueblos indígenas pierdan su lengua nativa, su lengua materna. Lo que estamos haciendo es, precisamente escribiendo, enseñando a los estudiantes de educación primaria y educación secundaria, pero lo importante es que hablemos en la casa antes de ir a la escuela. Yo soy del criterio que la gente que habla una lengua indígena, tiene una forma de pensamiento estructurado, codificado, diferente al de los demás. Eso es lo rico de conservar, de mover tu lengua materna. 

¿Sentís que se pierde esa transmisión conforme pasan las generaciones?

Hay mucha gente que ha perdido, que han dejado de hablar su lengua materna. ¿Cuáles han sido los factores? Que han salido de la comunidad, que se fueron a estudiar, que se casan con una mujer de otra habla o con un hombre de otra habla y viven en la ciudad, aunque  son de padres mayangna, o de madre mayangna, ya no hablan mayangna con sus hijos. Yo sufrí la discriminación. Cuando yo tenía 11 años salí de mi comunidad en Puerto Cabezas para estudiar secundaria, mi familia cuando salíamos a la calle me prohibía hablar en mayangna, porque los miskitos, los mestizos, se burlaban cuando se dan cuenta que vos sos de habla mayangna. La Ley de lenguas de 1992, la ley 445, y otras leyes recorren y favorecen los derechos de las comunidades indígenas. El sistema educativo SEAR, que pues, hasta ahorita no se está practicando a su totalidad, sin embargo hay  diálogos de reactivación para que los niños en la primaria -no solo de primer a cuarto grado- hablen, reciban clases en su lengua materna.

¿Qué se puede hacer para que las lenguas indígenas tengan una mayor difusión?

Hay un debate interno en nuestro mundo, dentro de los diferentes pensadores mayangnas. Hay quienes sostienen que no se debe difundir, y no se debe de enseñar a otra gente. Hay otras corrientes que sostienen que no… si yo me veo obligado a aprender el inglés, ¿por qué el otro no puede estar obligado a aprender mi lengua materna si llega a mi territorio? Yo comparto con eso de la conservación, de no compartir; sin embargo, depende del enfoque que quieran, cómo lo quieran dar para enseñarlo. Por ejemplo hay gente que quiere aprender una lengua con buena fe, quizás haya otra gente que quiera aprenderla con mala fe, por ejemplo, por ejemplo  el plagio o robo de identidad. Debe haber unos criterios bien definidos, cuándo enseñar y bajo qué términos difundirlo, a quién se le puede enseñar, a quién no se le puede enseñar. Entonces esos son temas que ahorita se están trabajando, entiendo que lingüistas mayangnas están trabajando en una academia de la lengua indígena mayangna.

¿Qué sentís que cambia en el mayangna para nombrar el mundo o para nombrar las cosas que están alrededor?

El mayangna al igual que muchas lenguas indígenas en el mundo, este, tiene una expresión espiritual, se siente que la lenguas coloniales, el inglés, el portugués, el español este, son materiales, son materiales; mientras que las lenguas de, las lenguas propias, las lenguas nativas originarias vienen acompañado de una relación, de una expresión espiritual. De una conexión con diferentes elementos de la naturaleza que nos une. Cuando pierdes tu lengua materna, has perdido tus conocimientos propios; como pueblo, este, pueblo milenario, y te adaptas a otra lengua que tiene otros pensamientos, que tiene otras explicaciones que ni siquiera entendemos.