
Bukele, presidente de El Salvador y “asesor de seguridad” para el mundo
Maldito País
enero 30, 2025
En la red social “X”, el empresario multimillonario Elon Musk citó un tuit donde se destaca la reducción de homicidios en El Salvador, con la frase: “Necesitamos que esto pase y esto pasará en América”. Ante esto, el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, respondió ofreciendo su apoyo en materia de seguridad en Estados Unidos: “Podríamos apoyar”.
We could help… https://t.co/P6VwncUdPw
— Nayib Bukele (@nayibbukele) January 2, 2025
Y es que Estados Unidos terminó el 2024 e inició el 2025 con graves noticias en temas de seguridad. Un tiroteo en Wisconsin, el 17 de diciembre, dejó 3 personas fallecidas y 6 heridas a manos de un adolescente. Otro se registró el 2 de enero, en una discoteca en Nueva York, mientras que el 1 de enero, un vehículo arrolló a una multitud que celebraba año nuevo.
Sin embargo, la opinión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre la seguridad en El Salvador, no hace referencia a una necesidad de ayuda por parte del país centroamericano en ese tema. Durante la Convención Nacional Republicana, en julio del año pasado, declaró que la reducción de homicidios en El Salvador y Venezuela no era gracias a sus gobernantes, sino a que estos países “están enviando a sus asesinos a Estados Unidos”.
“En El Salvador, ha bajado la tasa de delincuencia un 70%. ¿Por qué? Dirán que porque han estado entrenando a los homicidas para que sean personas mejores, pero no. Ha bajado porque están enviando a sus homicidas a los Estados Unidos de América”, expresó Trump en su discurso de aceptación de su candidatura presidencial.
Pese a la aparente buena relación entre El Salvador y Estados Unidos, fue notoria la ausencia de Bukele durante la toma de posesión del ahora presidente del país del norte.
Esta afirmación tiene sustento en investigaciones periodísticas que han confirmado la salida de varios líderes de grupos criminales hacía otros países como Guatemala, México o Estados Unidos. Ingrid Escobar, directora del Socorro Jurídico Humanitario, considera “hipócrita”, el ofrecimiento hacia el país del norte, debido a este contexto.
“Nosotros tenemos conocimiento que antes del régimen de excepción, el gobierno de El Salvador no solamente avisó a líderes con los que estaba pactando para que huyeran a otros países, incluido Estados Unidos, sino que ayudó a ciertos líderes de estas estructuras criminales. Se conoce que fueron escoltados hasta Guatemala, terminando en México y otros en Nueva York. Algunos de estos ya están capturados por el FBI y están en un proceso penal y ya muy pronto lo que se va a dar a conocer es la confirmación de lo que hemos estado denunciando: que no hay ningún éxito en el régimen de excepción, lo que hubo es una tregua con las pandillas que bajó los homicidios”.
Esta no es la primera vez que Bukele ofrece “ayuda” en seguridad a otros países del continente. De la misma forma que se ofreció a los Estados Unidos, a través de X, dijo que “podía arreglar” la situación de Haití, con tan solo el consentimiento del país, una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU y que se cubrieran los gastos de la misión.
We can fix it.
— Nayib Bukele (@nayibbukele) March 10, 2024
But we’ll need a UNSC resolution, the consent of the host country, and all the mission expenses to be covered. https://t.co/GPqMVo7MTN
El viernes 20 de diciembre, la Asamblea Legislativa de El Salvador aprobó la «Ley Transitoria para la Participación de la Fuerza Armada de El Salvador (FAES) en la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MMAS) en Haití», que autoriza a la FAES a enviar aeronaves de ala rotativa, completamente equipadas para evacuaciones médicas y con protección de otras aeronaves propias y otros vehículos que se consideren necesarios para la misión.

En febrero de 2024, durante una conferencia de prensa luego de los comicios en los que obtuvo la reelección inconstitucional, Bukele dijo que había ofrecido “una colaboración” a Argentina en todos los temas referentes a seguridad. Dicha colaboración se concretó con la visita de la ministra de seguridad de Argentina, en marzo, y la visita del mandatario salvadoreño al país del sur, en octubre.
Ahí, Bukele dijo que cada país debe actuar acorde a su realidad y contar con el apoyo consensuado de todos los sectores. Puso como ejemplo que la fiscalía salvadoreña “a pesar de ser independiente del Ejecutivo, nos dió todo su apoyo”, omitiendo que el fiscal general, Rodolfo Delgado, fue electo en 2021 por diputados del partido oficial, Nuevas Ideas, a través de un procedimiento cuestionado por organismos internacionales, ya que no siguió los procesos establecidos.
Luego de su elección, la Fiscalía detuvo una investigación sobre presunta corrupción en el Gobierno de Bukele, conocida como el caso “Catedral”. Además, Delgado puso fin a un acuerdo con la Comisión Internacional contra la Impunidad en El Salvador (CICIES), luego de que esta señalara posibles actos de corrupción en el Gobierno.
La visita de Bukele y parte de su gabinete culminó con diferentes acuerdos en materia de cultura, formación diplomática, colaboración aeroportuaria, cooperación deportiva y cooperación en los usos pacíficos de la energía nuclear. En los comunicados oficiales no se mencionan acuerdos en materia de seguridad.
Tampoco se conoce más allá de los acuerdos de colaboración conversados con la Ministra Bullrich, cuando visitó el país, momento en el que también visitó el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), una cárcel con más de 40 mil reos hasta el momento. La idea de Bulrrich fue llevar todas las medidas implementadas en El Salvador hacia Argentina, en especial en la región de Santa Fe, que según medios oficiales, estuvo marcada por la delincuencia y operaciones de grupos del narco.
Sobre estos ofrecimientos de asesoría en seguridad, el director de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD), Hector Carrillo, explica que la apertura con otras naciones para trabajar de forma conjunta en cualquier tema, es algo positivo. Sin embargo, considera que el propósito de estos ofrecimientos es enaltecer la figura de Nayib Bukele y disminuir los cuestionamientos de organizaciones nacionales e internacionales sobre las violaciones a Derechos Humanos y el irrespeto al Estado de Derecho.
“Creemos que ese es el propósito, más allá de que puedan tener algo que ofrecer. La disposición a colaborar en materia de seguridad es muy buena, pero esa colaboración debe ser de manera integral. Está bien que colaboren compartiendo las acciones que han impulsado, pero que también sería oportuno que den a conocer las consecuencias que ha tenido, las negativas, desde la perspectiva de derechos humanos”, expresó Carrillo a HoraCero.
“Nadie puede ser violento más que el Estado”
Otro país que recibió la “ayuda” del presidente Bukele fue Costa Rica, después de su visita en noviembre de 2024. Durante su discurso, el mandatario de Costa Rica, Rodrigo Chaves, elogió los resultados en materia de seguridad de El Salvador y dijo que tomarán “lo mejor de estas experiencias” para fortalecer su lucha por la paz.
Nayib Bukele habló -nuevamente- en qué consiste su estrategia de seguridad, en donde destacó que “nadie puede ser violento más que el Estado”, para garantizar la paz.
“El Estado debe intervenir y hacer valer su monopolio sobre la violencia, nadie puede ser violento más que el Estado, solo para intervenir y mantener la paz, nada más, la fuerza del Estado debe de ser para garantizar a quienes nunca se le defienden los derechos humanos”, dijo.
Su frase es algo que cala y se siente en El Salvador. Organizaciones señalan más de 3 mil denuncias de capturas arbitrarias, más de 200 muertes de personas bajo custodia del Estado, denuncias de torturas, abuso de poder, entre otras violaciones a Derechos Humanos
El Informe del Estado de excepción y derechos humanos de El Salvador, de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), conoció denuncias de violaciones a los derechos humanos perpetradas por las fuerzas de seguridad que incluyen: detenciones ilegales y arbitrarias sistemáticas y generalizadas, el allanamiento ilegal de moradas, abusos en el uso de la fuerza y violaciones a los derechos de niñas, niños y adolescentes.
Además, recibió información sobre desafíos específicos en el acceso a la justicia frente a las detenciones realizadas y sus implicaciones en la garantía de los derechos de las personas salvadoreñas a las garantías judiciales y protección judicial.
En la primera plenaria del 2025, la Asamblea Legislativa aprobó la prórroga número 34 del régimen de excepción por otro mes, de manera exprés y con dispensa de trámite. Una medida que lleva dos años con suspensión de derechos constitucionales,
