Con la pausa de este programa que permitía el ingreso regular para migrantes de 4 nacionalidades se generan mayores dificultades para quienes guardaban la esperanza de una respuesta positiva para ingresar a los Estados Unidos. 

Esto es aprovechado por los grupos conversadores y la avanzada del discurso antiinmigrante de Donald Trump, actual candidato a la presidencia. Por ello este cierre temporal es un golpe duro en medio de las altas tensiones entre Republicanos y Demócratas que buscan llegar al poder. 

Los grupos conservadores pro Donald Trump insisten y empujan iniciativas de cierre a programas como el parole humanitario -que desde su aprobación ha sido bastante cuestionado- en su defensa ubican puntos o vacíos de las propuestas y programas ya vigentes, y mediante un informe de la Federación para la Reforma Migratoria Estadounidense (grupo de ultraderecha) se han filtrado las supuestas “irregularidades” del programa migratorio, solicitando su anulación completa bajo los argumentos que describen en su informe.  

Este grupo que denominan defensores de la aplicación de las leyes de inmigración quienes se oponen firmemente a los programas denominados de  “libertad condicional ilegales” creados por la administración Biden-Harris, los tachan de propuestas “ilegales” y profundizan en adjetivos que descalifican a las personas migrantes con necesidad de algún tipo de protección o un programa sombrilla que les permita su ingreso ordenado y regular a los Estados Unidos, como la opción del parole humanitaria que ha beneficiado a más de medio millón de personas entre las cuatro nacionalidades aceptadas. 

En definitiva esta suspensión un golpe fuerte y deja en el limbo a miles de familias que esperaban una respuesta o que estaban en planes de aplicación, incluso se vuelve más complejo para el actual contexto de Venezuela que atraviesa un momento convulso y cada vez su población tiene mayores barreras para salir y buscar otras opciones de vida que les permitan estar a salvo.