
Justicia feminista para Beatriz: la despenalización del aborto en El Salvador
Maldito País
marzo 19, 2025
En un contexto político con profundos retrocesos democráticos, en donde el fascismo, el populismo punitivo y el odio crecen contra nosotrxs, estamos resistiendo ante un gobierno salvadoreño que impone la permanencia de un régimen de excepción que ha implicado miles de detenciones arbitrarias, la adopción de una política de tortura en centros de detención y cientos de muertes bajo custodia estatal 1 . Nos encontramos frente a una realidad que impone la muerte con la derogación de la prohibición de la minería metálica y discrimina a través de políticas antiderechos que niegan la educación integral en sexualidad con discursos odiantes contra las personas LGBTIQ+.
Nos encarna la realidad de una Centroamérica que se caracteriza por imponer limitaciones en el acceso al derecho a decidir de las mujeres y personas con capacidad de gestar. Esta región concentra tres de los países en América Latina y el Caribe que sostienen la total prohibición del aborto: El Salvador, Nicaragua y Honduras.
Es en este contexto tan hostil que hemos articulado un repertorio de acciones y solidaridad que han tejido tramas que ponen al centro la lucha por la justicia, la dignidad y la libertad. De manera particular, considero crucial reconocer el activismo feminista, acompañamiento y lucha por la causa Beatriz 2 , que por doce años ha posibilitado nombrar, denunciar y okupar los espacios públicos para exigir justicia y reparación.
Su historia es crucial para las luchas por la despenalización del aborto en El Salvador. En 2013 al enfrentar un embarazo anencefálico de alto riesgo por su condición de lupus, Beatriz tomó la decisión de abortar para salvar su vida y salud a pesar del contexto punitivo salvadoreño, desafiando al sistema de salud y justicia.

Enfrentó violaciones a sus derechos humanos y discriminación ante un sistema que cerró sus puertas, con barreras y obstáculos para ejercer el derecho a decidir. La historia de Beatriz conmovió al movimiento feminista en El Salvador y la región. A finales del 2013 inició un proceso para demandar al Estado salvadoreño por todas las violaciones que enfrentó, la no repetición de los hechos fue el motor de esta lucha: “No quisiera que otras mujeres pasen lo mismo que yo pasé por eso he puesto una demanda al Estado” 3 , estas fueron sus palabras ante la discriminación que enfrentó al ser obligada a continuar con un embarazo de alto riesgo 4 .
En 2023 su historia fue conocida ante el Sistema Interamericano de Derechos Humanos en una audiencia pública en Costa Rica donde se movilizaron feministas de toda la región, esto sucede después de 10 años de lucha junto a su familia. El 20 de diciembre del 2024 la Corte IDH condenó al Estado salvadoreño por violaciones al derecho a la salud y violencia obstétrica contra Beatriz.
Es relevante destacar cómo su historia abrió caminos para la transformación social del derecho a decidir en El Salvador y la región. En primera instancia, dejó en evidencia la problemática social de la penalización absoluta del aborto, visibilizando las afectaciones en la vida y cuerpos de las mujeres y personas con capacidad de gestar. En segundo lugar, el testimonio de Beatriz y familiares ha sido central para dinamizar el movimiento por el derecho a decidir en El Salvador, generando profundos aportes en la lucha contra el estigma social del aborto, es decir, nombrarlo con todas sus letras, okupar espacios públicos, dialogar y debatir en comunidades, universidades y medios de comunicación.
Beatriz, al desafiar el sistema patriarcal salvadoreño, puso en evidencia las relaciones desiguales de poder que se construyen a partir de sistemas de salud y justicia que nos excluyen, criminalizan y asesinan. Su caso nos movilizó para tejer solidaridad feminista a nivel nacional y regional. Beatriz abrió caminos, su historia nos ha llevado a construir justicia desde el acompañamiento cotidiano, la escucha y las acciones de calle. Su lucha nos ha permitido construir otras formas de justicia y reparación, una justicia feminista.
Al gritar #JusticiaparaBeatriz, nombramos una realidad invisibilizada por los sistemas de opresión heteropatriarcales que violentan nuestros cuerpos-territorios. Queremos justicia feminista y reparación integral que abra paso a transformaciones estructurales. Hoy más que nunca la lucha de Beatriz nos da fuerza y nos permite agrietar al sistema para que el aborto sea libre en toda Centroamérica.
Notas
El Salvador: Mil días de régimen de excepción, un modelo de “seguridad” a costa de los derechos humanos https://www.amnesty.org/es/latest/news/2024/12/el-salvador-mil-dias-regimen-excepcion-modelo-seguridad-a-costa-derechos-humanos/
- Más información sobre la causa de Beatriz : https://agrupacionciudadana.org/justicia-para-beatriz/
- Video: Beatriz un legado de lucha por la vida: https://www.youtube.com/watch?v=2k7ZUbHZnlc
- El proceso de interponer la demanda contra el Estado Salvadoreño ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos fue acompañado y colitigado por la Agrupación Ciudadana por la despenalización del aborto, Colectiva Feminista para el Desarrollo Local, IPAS y CEJIL
